Envidia mala

La envidia es muy mala. Esta frase se escucha a menudo en muchísimos círculos, creo que damos por hecho que es cierta y que atiende a un problema muy generalizado en nuestro país. Es más, hay quien dice que la envidia es el deporte nacional, por algo será. La cuestión es que he notado que hay gente que siente envidia de mí, y la verdad es que no sé por qué, a veces me da la impresión que la cuestión es por cómo me expreso en este foro, por ser capaz de decir lo que digo y cómo lo digo. Porque desecho la idea de que sean otras las causas que provocan ese vómito de envidia, léase por mi trabajo, por mi familia o porque me gusta la cerveza fresquita, yo qué sé. A fin de cuentas pienso que el envidioso es un enfermo, lleno de complejos y con una autoestima que corta el césped, algo preocupante que debería hacérselo ver por un especialista. Otra cosa es lo que se llama envidia sana, que ni eso es envidia ni es ná parecido, eso es admiración y ganas de semejanza, por lo que está claro lo dicho al principio, que cualquier envidia es mala. En un pueblo de envidiosos, los envidiados somos felices, o al menos más que ellos, seguro.